“Como
ustedes no me atendieron cuando los llamé, ni me hicieron caso cuando les tendí
la mano, sino que rechazaron todos mis consejos y no acataron mis reprensiones,
ahora yo me burlaré de ustedes cuando caigan en desgracia. Yo seré el que se
ría de ustedes cuando les sobrevenga el miedo”. Proverbios 1:24-26 NVI
Dios
le habla al hombre en idioma y códigos de hombres, para que lo entiendan y no
lo tomen en broma.
Es
cierto, se está refiriendo a todos los que le han rechazado y han despreciado
lo que él, en su bendita misericordia les ofrecía sin cargo alguno, como no hay
nada ofrecido en la tierra.
¿Dios
se burla?
Suena
un poco cruel o fuerte…
¿Verdad?
Depende
como tomes este término.
Burlarse
en idioma humano es hacer muecas, reírse a carcajadas o cosas parecidas de
alguien que está sufriendo, pero en idioma de Dios, es algo totalmente
distinto.
Es
una forma de reconvenir una vez más para dar, si es posible, otra oportunidad a
todos aquellos que por cualquier causa, han decidido dejar pasar de largo la
anterior.
¿Incrédulos?
Sí,
pero todos.
¿Cómo
que todos?
Todos
los incrédulos, los que jamás pisaron una iglesia ni oyeron hablar de
Jesucristo y también los que aparentan adorarle cada fin de semana.
Amén.
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